El año 2016 conocí un caso de caída de árboles urbanos en la comuna de Maipú, en el que se identificó que los árboles caídos en calles paralelas contiguas durante un temporal formaban una línea, de lo que se dedujo que todos ellos fueron volcados por una misma ráfaga de viento. El año anterior se registraron ráfagas de 180 km/hr en el faro El Panul, comuna de San Antonio.
Este año nuevamente caen árboles debido a un temporal (fenómeno climático que se caracteriza por presentar vientos por sobre los 60 km/hr.), los que según versiones de prensa, durante el 30 de mayo del 2019 ascendieron a más de 750 árboles caídos en menos de 24 horas. En el siguiente video se muestra la forma en que la noticia del temporal fue emitida por tres distintos canales de televisión, destacando el titular "Faltan Recursos para Mantener Árboles", se habla también de "Inspección Visual", del "riesgo que implica tener árboles de más de 100 años", de "arboles enfermos".
Este año nuevamente caen árboles debido a un temporal (fenómeno climático que se caracteriza por presentar vientos por sobre los 60 km/hr.), los que según versiones de prensa, durante el 30 de mayo del 2019 ascendieron a más de 750 árboles caídos en menos de 24 horas. En el siguiente video se muestra la forma en que la noticia del temporal fue emitida por tres distintos canales de televisión, destacando el titular "Faltan Recursos para Mantener Árboles", se habla también de "Inspección Visual", del "riesgo que implica tener árboles de más de 100 años", de "arboles enfermos".
Se aprecia que las versiones periodísticas son inexactas, superficiales y no se refieren a las causas del problema que intentan abordar.
Entre los aspectos que explican la caída de ramas y el volcamiento de árboles se encuentran: la velocidad del viento o de las ráfagas, la frecuencia del viento (en Magallanes hay vientos de 200 km/hr. y los árboles no caen debido a que crecieron con ese estímulo); a las características del sitio (suelo: profundidad, inclinación, consistencia, compactación); sequía (menor precipitación que el promedio anual durante los últimos 10 años). Algunos autores incluyen la edad del árbol lo que no tiene mucho sentido ya que no es determinante. Lo que no se menciona y es el factor más importante es el tipo de gestión (manejo) que se hace o se ha realizado a cada árbol.
Entre los aspectos que explican la caída de ramas y el volcamiento de árboles se encuentran: la velocidad del viento o de las ráfagas, la frecuencia del viento (en Magallanes hay vientos de 200 km/hr. y los árboles no caen debido a que crecieron con ese estímulo); a las características del sitio (suelo: profundidad, inclinación, consistencia, compactación); sequía (menor precipitación que el promedio anual durante los últimos 10 años). Algunos autores incluyen la edad del árbol lo que no tiene mucho sentido ya que no es determinante. Lo que no se menciona y es el factor más importante es el tipo de gestión (manejo) que se hace o se ha realizado a cada árbol.
Para demostrar lo señalado respeto del la gestión que se realiza de cada árbol, a continuación analizaré brevemente cuatro casos de caída de árboles durante el último temporal.
1.- Pino de 100 años que se volcó en Plaza Brasil. Se trata del árbol que se observa en la imagen del costado derecho de este párrafo, el que fue reportado por la prensa como un ciprés. En realidad se trata de un pino sp. que se volcó debido a ráfagas de viente de dirección norte - sur. La versión oficial respecto de la caída apuntó a un posible "ataque" de hongos que afectó sus raíces.
Si observamos con detención las imágenes provistas por los medios de comunicación, nos daremos cuenta que se cortaron ramas gruesas al árbol justo en su lado norte. Se observan 2 heridas en la mitad del fuste y una herida más grande aún en la base del árbol. Debido a estas mutilaciones es que las raíces del árbol dejaron de recibir sustento, de alimentarse, lo que afectó su capacidad de sostener el árbol. Es muy probable también que la herida más antigua, la de la base, permitiera la entrada de hongos hacia sus tejidos, lo que incluye las raíces.
2.- Caída de árbol en La Reina. El vuelco de un falso acacio (Robinia pseudoacacia) fue ampliamente difundido en la televisión chilena. En este caso también, durante los largos minutos en que reiteraron la escena más de 15 veces, fue nulo el aporte de los periodistas en el análisis de la situación. Se trataba claramente de un árbol que ha sido mal gestionado, aplicando podas innecesarias, malas prácticas que lamentablemente continúan repitiéndose.
Al caer el tronco atraviesa la calle y la copa queda al interior de la casa de enfrente, al otro lado de la calle, lo que indica que la copa se iniciaba por sobre los 6 metros de altura. Estos árboles fueron podados para "levantar la copa" o con un refaldado excesivo. Eso fue en definitiva lo que facilitó su caída. A esta fecha ha caído todo el follaje de las robinias, de tal forma que su copa no generó un "efecto vela". El problema real son las malas prácticas que alteraron su centro de gravedad, elevándolo, generando las condiciones para que el árbol se volcara fácilmente.
3.- Árboles quebrados a media altura. La debilidad generada en el tronco de árboles adultos por eliminación de ramas utilizando el criterio del "corte perfecto" ideado por Alex Shigo, aquel corte que se realiza en el "cuello de la rama" o peor aún, el corte a ras del la corteza del tronco para que no se note, es la causante de la fractura del tronco cuando sufre la fuerza del viento. El famoso criterio, difundido ampliamente en el mundo, es la principal causa de muerte de árboles urbanos.
Efectivamente, el "corte perfecto" es un concepto que erróneamente aún se aplica a árboles adultos, generando heridas que el árbol nunca llega a sellar con crecimiento propio. Muchas personas que se califican de "expertos" afirman que: no se debe cortar ramas de más de 10 centímetros de diámetro. Pero de donde sacan tales afirmaciones sin fundamento? Ocurre que esas afirmaciones son extraídas del mismo lugar de donde viene el "corte perfecto": del ámbito de las entelequias.
4.- Vuelco de árboles por escaso desarrollo de raíces. otro de los problemas que afecta a los árboles urbanos radica en la compactación del suelo que se realiza al construir una calle o vereda. En ambas situaciones se compacta el suelo con rodillos quedando en el caso de veredas compactado hasta 2 metros de profundidad y en calles hasta 6 metros de profundidad. La construcción de casillas (hoyos) es imposible con herramientas comunes como chuzo (barreta) o pala, siendo necesario recurrir a otros medios para lograr el objetivo, siendo en muchos casos necesaria la utilización de martillo hidráulico (martillo demoledor o rompe pavimento). En la foto de la derecha se observa la caída de un árbol que fue plantado justo al borde de una vereda.
Los árboles para sostenerse y mantener un Centro de Gravedad lo más bajo posible requieren de un adecuado desarrollo de raíces, requisito poco apreciado por aquellos que se indignan porque las raíces de los árboles rompen las veredas. Efectivamente, con el suelo compactado el único espacio que tienen para desarrollarse las raíces de los árboles es entre el suelo y el pavimento de las veredas. Convengamos en que es muy extraño también encontrar árboles con alcorques (taza), denotando que la mantención que se realiza en tremendamente deficiente.
Recapitulando
En este artículo no se han abordado todas las situaciones que se pueden dar con relación a caída de árboles o ramas, habiéndose analizado solo dos situaciones genéricas, a saber: vuelco de árboles (uno en plaza y dos en la vía pública) y colapso del tronco a media altura. Las causas son evidentes y se deben a aplicación pretérita de malas prácticas en poda (corte de ramas a árboles adultos, levantamiento de copa innecesario y perjudicial, escaso desarrollo de raíces.
Queda en evidencia que la causa de la caída de los árboles analizados ha sido una gestión equivocada, errónea, quizás errática en el tiempo, situación que se puede prever y solucionar. La caída de árboles y ramas que ocurre hoy es producto de la aplicación de malas prácticas efectuadas como se señalaba hace ya varios años atrás.
La realidad nos muestra que existe un alto riesgo (probabilidad de que algo ocurra) de que los arboles continúen siendo gestionados por personas sin conocimiento, lo que constituye un real peligro para la sociedad en temas de arbolado urbano. Muchas veces se habla de ARBOLES RIESGOSOS o de ÁRBOLES PELIGROSOS, cuando la realidad nos muestra que el nivel de riesgo y el nivel de peligro proviene de una mala o pésima gestión que se realiza a y con los árboles urbanos.
Teniendo presente lo señalado se debe considerar una mayor presencia de fenómenos climáticos como tornados, ráfagas de viento, etc, que atenta contra la estabilidad de los árboles. Lo señalado apunta a disponer de una planificación del árbol urbano realizada en base a conocimiento de última generación, que permita al gestor explicar el porqué de las acciones que realiza, considerando que cada árbol presenta una situación diferente que debe ser sopesada, evaluada y apreciada en su real dimensión.
No se trata de llegar y salir a mutilar árboles porque puede haber ráfagas de viento en el próximo temporal o porque hubo un tornado y puede haber otro tornado más, muy por el contrario: se trata de gestionar los árboles urbanos de tal forma que soporten las inclemencias del tiempo y nos puedan seguir aportando un máximo de beneficios ambientales, sociales y económicos.
Al caer el tronco atraviesa la calle y la copa queda al interior de la casa de enfrente, al otro lado de la calle, lo que indica que la copa se iniciaba por sobre los 6 metros de altura. Estos árboles fueron podados para "levantar la copa" o con un refaldado excesivo. Eso fue en definitiva lo que facilitó su caída. A esta fecha ha caído todo el follaje de las robinias, de tal forma que su copa no generó un "efecto vela". El problema real son las malas prácticas que alteraron su centro de gravedad, elevándolo, generando las condiciones para que el árbol se volcara fácilmente.
3.- Árboles quebrados a media altura. La debilidad generada en el tronco de árboles adultos por eliminación de ramas utilizando el criterio del "corte perfecto" ideado por Alex Shigo, aquel corte que se realiza en el "cuello de la rama" o peor aún, el corte a ras del la corteza del tronco para que no se note, es la causante de la fractura del tronco cuando sufre la fuerza del viento. El famoso criterio, difundido ampliamente en el mundo, es la principal causa de muerte de árboles urbanos.
Efectivamente, el "corte perfecto" es un concepto que erróneamente aún se aplica a árboles adultos, generando heridas que el árbol nunca llega a sellar con crecimiento propio. Muchas personas que se califican de "expertos" afirman que: no se debe cortar ramas de más de 10 centímetros de diámetro. Pero de donde sacan tales afirmaciones sin fundamento? Ocurre que esas afirmaciones son extraídas del mismo lugar de donde viene el "corte perfecto": del ámbito de las entelequias.
4.- Vuelco de árboles por escaso desarrollo de raíces. otro de los problemas que afecta a los árboles urbanos radica en la compactación del suelo que se realiza al construir una calle o vereda. En ambas situaciones se compacta el suelo con rodillos quedando en el caso de veredas compactado hasta 2 metros de profundidad y en calles hasta 6 metros de profundidad. La construcción de casillas (hoyos) es imposible con herramientas comunes como chuzo (barreta) o pala, siendo necesario recurrir a otros medios para lograr el objetivo, siendo en muchos casos necesaria la utilización de martillo hidráulico (martillo demoledor o rompe pavimento). En la foto de la derecha se observa la caída de un árbol que fue plantado justo al borde de una vereda.
Los árboles para sostenerse y mantener un Centro de Gravedad lo más bajo posible requieren de un adecuado desarrollo de raíces, requisito poco apreciado por aquellos que se indignan porque las raíces de los árboles rompen las veredas. Efectivamente, con el suelo compactado el único espacio que tienen para desarrollarse las raíces de los árboles es entre el suelo y el pavimento de las veredas. Convengamos en que es muy extraño también encontrar árboles con alcorques (taza), denotando que la mantención que se realiza en tremendamente deficiente.
Recapitulando
En este artículo no se han abordado todas las situaciones que se pueden dar con relación a caída de árboles o ramas, habiéndose analizado solo dos situaciones genéricas, a saber: vuelco de árboles (uno en plaza y dos en la vía pública) y colapso del tronco a media altura. Las causas son evidentes y se deben a aplicación pretérita de malas prácticas en poda (corte de ramas a árboles adultos, levantamiento de copa innecesario y perjudicial, escaso desarrollo de raíces.
Queda en evidencia que la causa de la caída de los árboles analizados ha sido una gestión equivocada, errónea, quizás errática en el tiempo, situación que se puede prever y solucionar. La caída de árboles y ramas que ocurre hoy es producto de la aplicación de malas prácticas efectuadas como se señalaba hace ya varios años atrás.
La realidad nos muestra que existe un alto riesgo (probabilidad de que algo ocurra) de que los arboles continúen siendo gestionados por personas sin conocimiento, lo que constituye un real peligro para la sociedad en temas de arbolado urbano. Muchas veces se habla de ARBOLES RIESGOSOS o de ÁRBOLES PELIGROSOS, cuando la realidad nos muestra que el nivel de riesgo y el nivel de peligro proviene de una mala o pésima gestión que se realiza a y con los árboles urbanos.
Teniendo presente lo señalado se debe considerar una mayor presencia de fenómenos climáticos como tornados, ráfagas de viento, etc, que atenta contra la estabilidad de los árboles. Lo señalado apunta a disponer de una planificación del árbol urbano realizada en base a conocimiento de última generación, que permita al gestor explicar el porqué de las acciones que realiza, considerando que cada árbol presenta una situación diferente que debe ser sopesada, evaluada y apreciada en su real dimensión.
No se trata de llegar y salir a mutilar árboles porque puede haber ráfagas de viento en el próximo temporal o porque hubo un tornado y puede haber otro tornado más, muy por el contrario: se trata de gestionar los árboles urbanos de tal forma que soporten las inclemencias del tiempo y nos puedan seguir aportando un máximo de beneficios ambientales, sociales y económicos.
Santiago JM Del Pozo
docencia@e-ambiente.cl
Nota: Aunque el temporal abarcó más de cinco regiones solo se ha utilizado material disponible para la Región Metropolitana de Santiago.
Muy agradecido por el estudio sobre este tema. Queda en evidencia que la gestión arbórea está, en gran parte, en manos de ignorantes.
ResponderEliminarVivo en la comuna de Las Condes , agradecería que este articulo llegara a la municipalidad y a Sercotal que hace la mantención a los arboles de la comuna , cortando ramas a mas de de los 2 metros del tallo principal, he reclamado pero no importa .... es una lástima verlos como quedan.al parecer no enseñan a sus trabajadores.
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